El funeral de mis fantasmas

Perdida entre las sombras de mi misma.
Perdida tras del paso de los otros.
Perdida entre lo que dice la gente.
"¡No tomes esa decisión, no es inteligente!"

Y es que los demás viven sus vidas a través de mi. Carencias, frustraciones ¿Qué me pasó el día en que los conocí?

Los fantasmas opinan y juzgan sin cesar. ¿y sus propias acciones no las van a analizar?

Que aburrida soy, que muy rápido voy, que equivocada estoy.

Cuando eres joven el tiempo has de aprovechar, si no lo haces tus sueños se van a truncar.

Pero, ¿qué es aprovechar el tiempo para ti?

¿Es leer un buen libro?

¿O salir a bailar?

¿Es ver una película?

¿Es un rompecabezas armar?

Poco les importa a los fantasmas lo que es diversión para mi. Solo quieren criticarme, eso los va a divertir.

Poco les importa a los fantasmas que es lo que me hace realmente feliz. Solo quieren destrozarme porque es más fácil así.

Quizás estoy desprogramada, quizás soy diferente. Ahora lo digo con orgullo porque mi alma más no miente.

Me desviví por parecerme a mis fantasmas, ellos borraron la sonrisa de mi cara.

¡Y yo tan tonta, creyendo que eran ángeles que me cuidaban!

No eran más que un espejismo, no eran más que una ilusión. Quería ser parte de algo y les vendí mi corazón.

Cambié mis pensamientos sobre tantas cosas porque a mis fantasmas les parecían raros. ¡Quién diría que me iba a salir tan caro!

Decidí no sentirme mal por ser lo que soy, me siento segura en el camino en el que estoy.

Ahora me doy cuenta de que nunca fui fiel a mi. Y como dijo Canserbero siempre tienes que ir a ti.

Sigue tu camino.

Sigue tu camino, vete a donde quieras irte, vete sin pensarlo.

Pero no pienses que te estoy pidiendo que te alejes de mi.

Sigue tu camino, porque en él me convertiré en un pilar para apoyarte.
                                           
Sigue tu camino, porque en él encontrarás mis oídos para escucharte.

Sigue tu camino, porque en él encontrarás mi hombro para desahogarte.

Sigue tu camino, porque en él encontrarás mis brazos para acobijarte.

Sigue en tu camino, porque en él encontrarás mi voz para aconsejarte.

Sigue tu camino, vete a donde quieras irte, vete sin pensarlo... porque no importa el camino que sigas, en él yo iré de tu mano.